Urge Plan de Emergencia

Una de las principales batallas que está librando esta fiscalía es el lograr que el Liceo cuente con un Plan de Emergencias con el fin de prevenir los riesgos y mitigar las consecuencias de un eventual desastre en la institución (tormenta, incendio, sismo, explosión, etc.). Parece sorprendente que nuestra institución no cuente aún con la organización necesaria para enfrentar una situación de emergencia que pudiera suscitarse. Sin embargo, por el momento, la Administración del Liceo no ha mostrado el interés que requiere este tema pese a la insistencia de esta fiscalía.

Desde el pasado mes de mayo, cuando entró en funciones esta fiscalía, se cuestionó a la Junta Directiva sobre la inexistencia de un Plan de Emergencias, y la respuesta en ese entonces fue que se "estaba trabajando en eso".  La realidad es que no hay siquiera un diagnóstico de riesgos.  En la reunión de Junta Directiva del 12 de junio se discutió nuevamente la necesidad de contratar a una empresa para elaborar un plan de emergencias y se dieron instrucciones en ese sentido al señor Administrador.  En la pasada reunión de Junta Directiva del martes 31 de julio, al ser cuestionado sobre los avances en este importante tema, la respuesta que se tuvo por parte de la Administración fue que se estaba a la espera de recibir ciertos fondos para comenzar el proceso de contratación de una empresa asesora para la elaboración del Plan de Emergencia. De nuevo, se trata de una muestra del desinterés y letargo de la Administración del Liceo en temas prioritarios como lo son la seguridad de la población estudiantil y personal del Liceo.

No se justifica entonces el atraso en un tema de "espera de fondos".  Lo más grave es que no existe por parte de la Administración un compromiso real con un tiempo claramente definido, con un plazo al que se le pueda dar seguimiento.

 

Es de suma urgencia contar con un instrumento adecuado para la prevención y protección de frente a los desastres (situaciones resultantes de fenómenos naturales o por acciones del hombre), de una organización institucional permanente, de un ejercicio de identificación e inventariado de las vulnerabilidades y riesgos a los que está expuesto el Liceo, de la asignación de recursos adecuados para prevenirlos, de esfuerzos de comunicación efectivos para divulgar las acciones preventivas y elaboración de estrategias de cómo actuar frente a determinadas situaciones. Todo esto acompañado de lo básico: un plan de evacuación, una señalización adecuada (por ejemplo de zonas seguras), equipo de seguridad en buen estado (alarmas, luces de emergencia, detectores de calor/humo, extintores, botiquines, etc.) y capacitación y entrenamiento al personal, los docentes y estudiantes. El primer paso es conformar un comité de emergencias institucional, encargado de poner en marcha todo lo concerniente a la prevención y atención de emergencias.

Preocupa mucho a esta fiscalía que la falta de un plan de emergencias, además de inaceptable por el solo hecho de que pone en riesgo a los estudiantes, constituye una infracción al reglamento de permiso sanitario de funcionamiento Nº 34728-S obliga a los centros educativos a contar con este instrumento. Así, la inercia de la Administración en este tema pone al Liceo Franco Costarricense en una situación irregular que podría desembocar en sanciones, e incluso la revocatoria del permiso sanitario de funcionamiento (que implicaría el cierre del liceo) por las autoridades de salubridad.

Requerimos del involucramiento de todos los asociados para manifestar a las autoridades ejecutivas y administrativas del liceo la urgente e imperiosa necesidad de contar con un plan de emergencias que garantice la seguridad de todos en el Liceo.